miércoles, 24 de agosto de 2022

Gustavo Balugano, ex volante del Pincha:

 “En estos días, veo a un Estudiantes de La Plata en permanente crecimiento”

Por @Gonza_Rossi

En forma muy exclusiva, el ex mediocampista Gustavo Balugano se hizo un tiempo para hablar con nosotros. Sobre sus comienzos en el fútbol, contó: “Empecé a los ocho años, en las Infantiles del club Ferroviarios Unidos de Zarate, localidad en la que nací. En ese equipo debuté en la Primera de la Liga Zarateña”.

  Además, comentó: “A los once, ya tenía conciencia de lo que era el fútbol. Recuerdo que en esa época, se estaba llevando a cabo el Mundial 1978 y fue en ese torneo que Mario Kempes se convirtió en mi primer ídolo en este deporte”. Por otra parte, en relación a su llegada a Estudiantes de La Plata, expresó: “Tras haber tenido un muy buen campeonato en la antigua B Nacional con Villa Dálmine, en la temporada 1989/90, el Pincha me contrató para afrontar el siguiente semestre”. Y agregó: “Cuando arribé al conjunto albirrojo, me encontré con un club muy organizado institucionalmente, pero que en ese entonces no estaba pasando un buen momento en lo futbolístico”.

  Asimismo, destacó: “Desde que llegué a Estudiantes, sentí el cariño de toda la gente del club: compañeros, hinchas, dirigentes, y allegados, por lo cual fue un placer haber estado en esa institución que hoy está tan distinta”.

  Con respecto al debut en Primera, admitió: “El técnico que me hizo debutar en la Primera de Estudiantes, fue Humberto Zuccarelli, en un partido de visitante con Vélez. Realmente, ese encuentro me marcó toda mi estadía en el club. Porque en esa oportunidad, me acuerdo de que a pesar de que sufrimos las expulsiones de 3 compañeros, logramos empatar el pleito sobre la hora”.

  También, estuvo en Platense. “Lo de ir a Platense surgió debido a una inactividad prolongada que tuve en Estudiantes, a causa de una lesión en una de las rodillas. Así que al finalizar la temporada 92-93, dejé al León para firmar en el Calamar”, subrayó.

  Conjuntamente, sostuvo que Villa Dálmine y Douglas Haig (P) son “dos clubes diametralmente opuestos. De Dálmine soy hincha. Es más, mi papá me llevó a la cancha del Viola por primera vez a los 10 años, lo vi salir campeón desde la tribuna varias veces y tuve la enorme satisfacción de ser campeón como jugador También, fui entrenador en las Divisiones Inferiores. Actualmente, voy a ver al cuadro de Campana siempre con mis hijos, que son fanáticos. Por otro lado, en Douglas pasé una buena etapa inicialmente, donde tuve la dirección técnica de Miguel Ignomiriello y Juan Echecopar. Pero el segundo semestre en el elenco de Pergamino no fue tan buena, sobre todo con la dirigencia”.

 A su vez, estuvo en Guaraní Antonio Franco (Misiones). “A mí me llevó Echecopar a Guaraní. Al inicio del certamen, tuvimos buenos partidos en el conjunto misionero, pero sobre el final del primer tramo del torneo se fue Juan y junto con él, varios jugadores. A partir de ese entonces, empezaron los inconvenientes, sobre todo dirigenciales”, expresó.

  Posteriormente, marcó: “Actualmente trabajo en una empresa metalúrgica de Campana”. Por último, cerró diciendo: “En estos días, veo a un Estudiantes de La Plata en permanente crecimiento. No solamente la construcción de ésa maravilla de estadio, sino también en toda la infraestructura que tiene montada en el Country Club de City Bell en lo que es el compromiso social y en la educación”. Con respecto a lo futbolístico, si bien quedó eliminado de la Copa Libertadores, creo que se están haciendo bien las cosas. Supongo que en poco tiempo va a recibir los frutos de ese trabajo”.

Fotos: Entreverados/ Santiago Auer.



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