“Hoy
manejo un autoelevador para una empresa de manera”
Por
@Gonza_Rossi
En forma muy exclusiva, el ex mediocampista
uruguayo Hugo Costela, se hizo un
tiempo para charlar con nosotros. Sobre sus inicios en el fútbol, recordó: “Mis comienzos se llevaron a cabo en el
baby, teniendo cuatro años”.
También, confesó: “Mi ídolo
siempre fue Enzo Francescoli”. Por otro lado, estuvo en Central Español (Uru). “Luego de terminar
el baby, estuve seis meses entrenando en la Séptima División de Peñarol,
jugando de zaguero. En una oportunidad, antes de que se inicie el torneo,
echaron al entrenador de dicha categoría y llegó otro DT. Este nuevo Director Técnico,
en una ocasión me hizo parar del banco donde estaba sentado y me preguntó de qué
jugaba. Por mi parte, le respondí de zaguero. Lo que generó que este entrenador
me dejara libre por ser muy bajo en este puesto que me ubicaba en ese entonces.
Tras quedar libre en el Manya, empecé a entrenar con un amigo del barrio en
Central Español. Posteriormente, a una semana de que comenzara el torneo, ya
fui fichado por el club”, señaló.
Conjuntamente, sostuvo: “Estando
en el cuadro Palermitano, me encontré con una institución donde se hacían
muchos sacrificios, en la cual me enseñaron bastantes valores y enseñanzas y
salieron jugadores de gran nivel”.
Por
otro lado, sobre el debut en Primera, admitió: “Debuté con 16 años, de la mano de Beethoven Javier”. También, jugó
en Defensor Sporting. “Una vez que lamentablemente descendimos con
Central Español, surgió la chance de pasar a préstamo a Defensor Sporting con
opción de compra”, expresó.
Más
tarde, anduvo en Olimpo (BB). “De mi
paso por Olimpo, remarco todo. La Ciudad, la gente y el club son muy parecidos
a Central Español, obviamente con muchas mejoras. Asimismo, en el equipo
bahiense se llevaban a cabo tareas por amigo a los colores. En lo deportivo,
realizamos grandes campañas, luchando para entrar a las copas internacionales”,
subrayó.
Luego,
pasó por Cerro Largo. “En Cerro Largo
estuve poco tiempo. No se cumplió la pautado y me fui de ahí antes de que
finalizara el contrato”, marcó. A su vez, comentó: “El cierre de mi carrera no fue el esperado. Estando en Defensor, me
operaron mal una de las rodillas, porque sufrí la rotura de ligamentos
cruzados. Esto, provocó que después me tuvieran que intervenir tres veces más, y
que ningún equipo me contratara por mis operaciones, salvo algunos casos.
Además, en ese periodo perdí a mi papa, me separé y quedé cargo de mis dos
hijas, y tuve que salir a pelearla por ellas de otra manera, afuera de las
canchas”.
Por
último, cerró diciendo: “Hoy manejo un
autoelevador para una empresa de manera. Ya mis mencionadas hijas tienen 17 y
20 años, y tengo un varón de nueve años con mi actual pareja. En lo futbolístico,
terminé el curso de entrenador”.
Foto: Alamy.
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